El ejercicio es absolutamente imprescindible para nuestra salud. Grandes y pequeños, nuestro cuerpo está diseñado para moverse y no para pasarnos el día mal sentados en una silla o yendo de la cama al sofá. Lo sabemos y lo tenemos en cuenta como uno de los grandes pilares de nuestra salud y de nuestro bienestar, pero, lo que para muchos es un auténtico placer antiestrés, una práctica clave para oxigenar el cuerpo y la mente y casi un vicio diario, para otros resulta una auténtica tortura… Y lo cierto es que, si lo vives como una obligación impuesta por ti mismo, por el médico o por el dietista, lo más probable es que abandones pronto y lo hagas con una gran frustración y sentimiento de derrota que impedirá que lo retomes a corto plazo.
¡Pero que los ánimos no decaigan! De deportes hay muchísimos, y lo que le gusta a tu pareja o a tu amiga puede no gustarte a ti, así que lo más importante, si todavía no has dado con tu favorito, es que sigas probando distintas disciplinas hasta que encuentres la que más encaja contigo y que su práctica se convierta en un hábito que agradecerás mucho más de lo que imaginas.
Para ayudarte a conseguirlo, aquí tienes nuestros cuatro consejos para principiantes que tal vez te den el impulso que necesitas para consolidar tu motivación y tu rutina deportiva.
Comparte tus avances
Al hacerlo, tendrás el reconocimiento de los demás, algo que motiva a seguir adelante y a no tirar la toalla. “La aprobación del entorno es un factor clave para mantener la motivación a la hora de emprender y mantener en el tiempo ese deporte”, explica la psicóloga MªCarmen Soliveres, del Hospital Vithas Medimar Internacional de Alicante.
Comprométete
Aliarse con una amiga “nos ayuda a cambiar hábitos saludables y hace que el entreno sea más divertido”, añade la psicóloga Soliveres. Aunque –matiza– si nuestra motivación no es muy fuerte, si la amiga lo deja, corremos el mismo riesgo.
Que la tecnología te ayude
Las apps y las pulseras de actividad son fantásticas para impulsar la motivación. “Nos permiten ver los resultados e ir mejorándolos, permiten compartir logros y nos dan información objetiva sobre nuestro entreno, algo que nos hace creer en nosotras mismas y sentirnos orgullosas”, detalla Soliveres.
Cree en ti
“Para no abandonar es necesario el equilibrio entre la importancia que le doy al ejercicio y la percepción de autoeficacia, es decir, ‘pensar que puedo’”, explica Mª Carmen Soliveres. Para ello –aconseja la psicóloga– “escribe una lista de razones por las que quieres o te gusta hacer ejercicio y, por otro lado, habría que pensar cómo hacerlo para que sea progresivo, divertido y pueda ir viendo los resultados esperados”.